26 de diciembre de 2017

RNE cumple 80 años II

Los que soportarais entera la entrada anterior sobre el tema ya tenéis una idea aproximada de cómo y para qué nació Radio Nacional de España. Pero su andadura ha sido larga y, aunque al servicio de una dictadura, fue ampliando horizontes y abriendo sus miras. Siempre bajo la férrea vigilancia de la censura y con el objetivo del adoctrinamiento, pero también haciendo pasar buenos ratos a un país en horas bajas y pintado en tonos grises a pesar del colorido de las fiestas populares y corridas de toros que el franquismo enarbolaba con orgullo.

Y así, entre las décadas de 1940 y 1950 se mejoraron las instalaciones y los equipos, y a finales de agosto de 1949 se comenzó a emitir desde Barcelona. Allí la obra de Eduardo Marquina En Flandes se ha puesto el sol inauguró el programa de dramatizaciones teatrales Teatro invisible. A partir de entonces, cada domingo durante los siguientes 20 años el Teatro Invisible acercó a los oyentes obras adaptadas al medio radiofónico y representadas en directo.

Las dramatizaciones han sido un género inherente a la radio y pocas emisoras se habrán resistido a ese dechado de creatividad que supone hacer que un relato sonoro genere imágenes mentales en el oyente. Algo que todavía hoy en día se sigue realizando (no con la frecuencia de antaño, pero sí con la misma calidad) a pesar del auge de los medios visuales. En el caso de Radio Nacional el espacio Ficción sonora, que se emite actualmente, ha recuperado el espíritu del antiguo Teatro invisible y otros posteriores como Historias o Los Cuentos en la Radio.


Volviendo a los años cincuenta, en esa década apareció también el Coro de Radio Nacional. El coro como tal había nacido el mismo 1950 bajo el nombre de Los Cantores Clásicos. En 1952 pasó a depender de Radio Nacional y su nombre cambió de acuerdo a la nueva situación. Todavía hoy permanece en activo y es considerado uno de los mejores conjuntos corales de España.

En 1944 se inauguró una nueva estación emisora de onda corta ubicada en Arganda del Rey, cerca de Madrid. Como era preceptivo, las instalaciones fueron visitadas por "su excelencia" y allí estuvo el NO-DO, recogiendo la noticia de esa visita al  nuevo edificio, hoy abandonado y en ruinas.


Desde este centro se retransmitió la visita de Eva Perón a España, que fue además uno de los primeros acontecimientos registrados en cintas magnetofónicas, conservadas actualmente en los archivos de Radio Nacional.

Aunque no tenga que ver específicamente con Radio Nacional, un año después, en 1955, el director de cine José Luis Sáenz de Heredia rodó Historias de la radio, un divertido y a ratos patético compendio de situaciones que, tomando como nexo de unión este medio, ronda el surrealismo y refleja en parte la vida en la España de mitad del siglo XX. Quien no haya visto la película y quiera pasar un buen rato, además de conocer el mundo de la radio por dentro, no se la puede perder.

Los años pasaron (como es obvio) y Franco con su partida (al otro barrio) se llevó las cadenas y los candados. Dos años después de su marcha, en octubre de 1977, se aprobó la liberalización de la información. Las emisoras ya podían dar sus propias noticias o, por decirlo de una manera más correcta, su propia versión de las noticias.

Martín Ferrand (segundo por la derecha) en Hora 25
(cadenaser.com)
Sin embargo la Cadena SER, única competidora de RNE en aquellos tiempos, ya emitía un informativo propio desde 1972. Manuel Martín Ferrand, en el ya mítico Hora 25, presentaba su propio espacio de actualidad, dejando claro al inicio que se había elaborado con noticias facilitadas por RNE, una ingeniosa forma de saltarse la prohibición de emitir informativos propios.

La Cadena SER (Sociedad Española de Radiodifusión) es la evolución de Unión Radio, que nació allá por mediados de los años veinte del siglo pasado y fue la voz radiofónica del bando republicano durante la guerra. El "unión" de su nombre hacía referencia a un compendio de emisoras y empresas tecnológicas (como Telefunken o Marconi) con intereses en la radiodifusión. Estaciones repartidas por España, normalmente con el nombre de la ciudad en que se encontraban (Radio Madrid, Radio Barcelona, Radio Sevilla...), se integraron paulatinamente en el grupo hasta cubrir todo el país. Los contenidos fueron aumentando a medida que crecía el número de socios, estableciendo emisiones locales y globales en las que todas las estaciones conectaban para ofrecer la misma programación.

Estudio de Radio Sevilla de Unión Radio (bne.es)

En los primeros tiempos de RNE esta compartió (por no decir ocupó) algunos estudios de Unión Radio cuando por sus propios medios no alcanzaba a cubrir ciertas zonas de España, situación que se solventó a partir de 1942 con la creación de una nueva estructura, la Red Española de Radiodifusión (Redera), lo que supuso un renacer de Radio Nacional, dotándola de mejores medios tecnológicos y humanos. Posteriores normativas han ido rediseñando el espacio radiofónico, y también el televisivo, en consonancia con los avances tecnológicos y con el interés de las empresas por hacerse un hueco en los medios audiovisuales.

Tras la liberalización informativa de 1977 Radio Nacional adelantó su Diario Hablado de las 14:30 a las 14:00, lo que supuso un involuntario favor a la SER, que mantuvo el horario de siempre, reteniendo a una parte importante de la audiencia que tenía el hábito de escuchar el informativo a las 14:30.

Muchos años después de terminada la dictadura española ya nadie relacionaba el "nacional" de Radio Nacional de España con una facción de la guerra, salvo, posiblemente, ciertos nostálgicos. Y parece que alguno de esos nostálgicos militaba en las filas de Izquierda Unida y propuso, 22 años después del fin de la dictadura, cambiar el nombre de la emisora para romper con su oscuro pasado (el de RNE).

También algunos nostálgicos, estos del bando opuesto y más peligrosos, montaron una de cuidado con el intento de golpe de estado del 23 de febrero de 1981.

Como en la segunda entrada sobre Televisión Española ya vimos de qué iba el asunto no vamos a entrar en detalles. Solo diremos que Radio Nacional fue una más de las emisoras que retransmitieron en directo los primeros momentos del asalto del coronel Tejero al Congreso de los Diputados. Poco después soldados y vehículos blindados ocuparon las instalaciones de TVE y RNE, conminando a la primera a continuar con la programación normal y a la segunda a emitir únicamente música militar.

Gran parte de los españoles permanecieron pendientes de la radio en aquellos aciagos momentos en lo que se conoce como "la noche de los transistores".

Pero vamos a cambiar de tema y a retroceder una vez más en el tiempo (una ventaja para los que no somos capaces de organizar bien los datos).

Volvemos a los años sesenta del siglo XX. RNE hizo uso de los avances tecnológicos del momento y añadió a sus espectros de emisión la frecuencia modulada, que permite transmitir el sonido con gran calidad.

El Segundo Programa de Radio Nacional, posteriormente llamado Radio 2 y actualmente Radio Clásica, se apoyó en esta mejora para comenzar sus emisiones en 1965. Desde entonces su principal cometido, como su actual nombre indica, es adentrarnos en el mundo de la música clásica,  aunque también explora terrenos como el del jazz o el flamenco, no solo a través de la música en sí, sino llevándonos más allá de los escenarios y las grabaciones para darnos a conocer lo que se esconde detrás de las obras y de sus autores, además de estar presente, con emisiones en directo, en importantes festivales, conciertos y representaciones.

En resumidas cuentas, un formato de emisora musical, pero apartando los contenidos de consumo fácil y dejando que otras propuestas más profundas llenen ese espacio libre con la intención de hacerlas accesibles al gran público.

En paralelo al nacimiento de Radio Clásica se produjo el de la Orquesta Sinfónica de RTVE, también en 1965. Su trabajo, junto con el Coro de Radio Nacional (conjunto que hoy se conoce como Orquesta y Coro de RTVE), no se limita a interpretar obras clásicas, sino que también lleva a cabo otras actividades como poner música a series y películas. Fue además la principal herramienta de Fernando Argenta en su programa de televisión El conciertazo, espacio repleto de juegos y personajes curiosos cuyo objetivo era la divulgación entre los más jóvenes de la música clásica de una manera divertida y amena.

Orquesta y Coro de RTVE (rtve.es)

A día de hoy la Orquesta y Coro de RTVE sigue en plena actividad y su trabajo podemos apreciarlo en el programa Los conciertos de la 2 emitido habitualmente desde el Teatro Monumental de Madrid, aunque, en el momento de escribir esto, el edificio se va a ver sometido a una importante rehabilitación, lo que ha llevado a buscar nuevos auditorios como el de San Lorenzo de El Escorial.

Y después del Segundo Programa vino el Tercero. Llamado así cuando en 1979 comenzó a formar parte de la emisión habitual de Radio Nacional para consolidarse como cadena independiente en 1981 con el nombre de Radio 3 Pop y luego Radio 3. España estaba cambiando. La cultura popular absorbía ideas venidas de fuera y las mezclaba y completaba con propuestas propias. Música, cine o literatura, prohibidas y marginales hasta poco antes, comenzaban a ganar fuerza y Radio Nacional se hizo eco de las nuevas tendencias culturales con esta emisora, concepto al que sigue siendo fiel hoy en día, aunque con un enfoque prioritario hacia el aspecto musical, con espacios monográficos sobre estilos imposibles de escuchar en emisoras privadas como heavy, música electrónica, flamenco, hip-hop, música norte y sudamericana, reggae o rap además de monografías, no sobre estilos, sino sobre conceptos, como buena música o música popular.

Algunos profesionales que emitían a través de Radiocadena Española pasaron a formar parte, junto con sus programas, de esta nueva opción de RNE.

Igual que su hermana clásica, Radio 3 también apuesta por la música en directo y, en colaboración con La 2 de TVE, produce el programa Los conciertos de Radio 3, un espacio de media hora dedicado íntegramente, como su nombre indica, a un concierto en sus propias instalaciones de Prado del Rey de Madrid. Por el pequeño escenario del programa han pasado durante muchos años músicos de todos los estilos posibles, con el añadido de que son actuaciones de cara al público, que puede acudir gratuitamente con solo apuntarse en la página web.

Músicas aparte, en Radio 3 todavía sigue teniendo cabida lo más variado de la cultura, desde la ciencia a los videojuegos, pasando por los comics, la literatura, el cine, los viajes o la poesía.

Y luego llegó Radio 4.

Durante la dictadura se crearon redes de emisoras, sobre todo locales, comprometidas con la causa y que duraron lo que duró aquella, conjunto conocido como Red de Emisoras del Movimiento. En 1974 estas redes se agruparon bajo el nombre de Radiocadena Española hasta que en 1989 sus antenas pasaron a formar parte de la estructura de Radio Nacional como Radio 4.

Pero la audiencia era escasa y se hizo necesario un cambio de enfoque. Apenas dos años después Radio 4 desaparecía y de sus cenizas nació, en 1994, Radio 5, lo que supuso el cierre de 24 centros ubicados en poblaciones de menos de 60.000 habitantes (que se cedieron a los ayuntamientos interesados en tener una programación local), y la reubicación de sus trabajadores, a la vez que se inauguraban siete nuevas estaciones emisoras para dar servicio a zonas antes cubiertas por Radio 4.
Solo siguió existendo Radio 4 un año más en Cataluña y Sevilla durante los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Expo de Sevilla. Una vez finalizados estos eventos la emisora dejó de funcionar en Sevilla, y en Cataluña se convirtió en la actual Ràdio 4, con la programación en catalán y restringida a esa comunidad autónoma.

El origen de Radio 5, ya está visto. Comenzó siendo una emisora de entretenimiento centrada en la información, aunque actualmente su programación es muy diversa y abarca también el aspecto cultural, generalmente mediante espacios monográficos de breve duración y un corto paréntesis de noticias de actualidad cada cuarto de hora.


Radio Exterior de España completa el grupo de emisoras de RNE. Nació oficialmente en 1971 emitiendo en onda corta y a través de satélites. Con su programación difunde al mundo el espíritu cultural, informativo y de servicio público de Radio Nacional.

No hay que confundir Radio Exterior con el Servicio de Programas para el Exterior, que se creó en 1965 y dependía de la Dirección General de Radiodifusión y Televisión del Ministerio de Información y Turismo. Su cometido era el intercambio de programación con emisoras extranjeras, pero no la emisión directa de contenidos.

En cuanto a Radio Exterior, su programación abarca espacios en idiomas extranjeros como inglés, francés, árabe, sefardí, portugués o ruso, además de castellano y el resto de lenguas oficiales españolas.

Actualmente gracias a internet cualquier emisora puede convertirse en una emisora mundial, pero sigue habiendo lugares en los que resulta complicado o caro el acceso a internet (un barco en alta mar, por ejemplo) y de ahí la utilidad de Radio Exterior, con programación adaptada a ese tipo de situaciones.

Paralelamente a la red nacional de radio se creó otra que comenzó a emitir en 1960. El entonces Ministerio de Información y Turismo, a cargo de Manuel Fraga, llevó a cabo una reestructuración de Radio Nacional y muchos centros locales pasaron a formar parte de una nueva red de emisoras englobadas bajo el nombre de Radio Peninsular.


Aunque también pública, esta red era de carácter comercial. Sus ingresos sufragaban en parte los gastos de RNE a la vez que posibilitaron el nacimiento de Televisión Española.

El reajuste de frecuencias decretado por el Convenio Internacional de Ginebra en Materia de Radiodifusión en 1975 abocó la desaparición de Radio Peninsular en 1979 en toda España salvo en Cataluña, donde siguió su andadura hasta 1984. Tal y como sucedería años después con Radio 4, el personal de Radio Peninsular fue reubicado en Radio Nacional y algunos de los programas más emblemáticos permanecieron en antena a través de ella.

Paciencia, que ya queda poco y con otra entradita de nada terminamos. En ella completaremos nuestro repaso a Radio Nacional y veremos en qué ha derivado una vez libre del yugo de la dictadura e impulsada por buenos profesionales (a los directivos y políticos vamos mejor a obviarlos).

2 comentarios:

  1. A mi me gustan mucho las propuestas de Radio 3, Dónde puedo escuchar música que en otros lugares invadidos por la radio fórmula o De índole más comercial es difícil de escuchar...

    También suelo escuchar bastante radio 5 con su diversidad de contenidos en curso la radio dedicada a la clásica

    Buen trabajo en la maquetación y en la recopilación de información y exposición de este artículo ...

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que, solo visitando la página web de Radio Nacional, hay tanto donde elegir que solo con ello tendríamos cosas interesantes que escuchar para el resto de la vida.

    Como he dicho en las entradas sobre el tema, es lo bueno de la radio pública, que se puede permitir contenidos imposibles de tratar en emisoras que vivan de la publicidad.

    ResponderEliminar